miércoles, 28 de octubre de 2009

Poemita a mi amigo Anghel

Bon ami, Anghel Morales,
hable usted con libertad,
que decir la tal verdad,
la blanca de las verdades,
en el lecho da solaz.

Yo ya no creo en lo negro,
ni tampoco en lo más blanco,
ni en lo azul ni en lo encarnao,
ni en el hielo ni el fuego,
porque ya too es un fregao

en este mundo banal
donde la cruenta mentira
es la paz, y es la ira
que con designio fatal
a todo bicho lo mira.

En lo alto luce la luna
harta del sol poderoso,
es la noche un calabozo
del niño que está en la cuna
llorando su triste esbozo

de la vida que tendrá.
No tendrá vida ninguna
ni en calles de La Laguna
ni en ningún otro lugar
mientras reine la oscura

noche del reino fatal.
Estoy jodido, mi hermano,
así que demos la mano
con la palabra cabal
al enemigo malsano

que no sabe qué es luchar
en el terrero gomero,
allí seremos primeros
en la semilla ganar
de un porvenir verdadero.

2 comentarios:

Azena dijo...

Siempre he pensado que eres muy buen poeta...

campanilla dijo...

Yo también pìenso que Jesús ante todo es poeta, y de los buenos, me alegro de que las musas vuelvan a inspirarle. gracias.