miércoles, 2 de diciembre de 2009

a Victor

Los aliados tomaron Tijuana
(ver blog de Lizundia, última entrada,
"mi hermano en la emisora" Radio Libre
de Tijuana, Radio Unión Tenerife,
con la bandera no de la región,
sino del país isleño de las siete estrellas
verdes, de la cagadas de mosca,
porque nunca se sabe a ciencia cierta
donde se esconde la realidad).

Ay don Victor Roncero, que la tradición no te deja
ver al pequeño cazador perseguir a la bella gacela,
así que para que todos aprendamos
que la estatura está en las partes encondidas del alma,
recordaremos, cuando vuelvas, pronto ojalá,
a la emisora... recordaremos ese cuento,
el de "La posesión", de Isaac de Vega,
y luego recordaremos otros cuentos
(y que nos vuelva a iluminar
el polvo dorado de la alada Campanilla).

1 comentario:

campanilla dijo...

Yo confesé mi secreto
a mi amigo D. Jesús
y él me dijo muy discreto
¿lo digo yo, o lo haces tú?

Ya me da rabia, no crean
decirles mi identidad
y aunque Uds. no me vean
vergüenza a mi me va a dar

porque todos me conocen,
unos menos y otros más
y todos razón llevaron
en su día al sospechar.

A D. Jesús no maldigan
porque él no lo sabía
que su novia le engañaba
siendo la tal Campanilla

yo me hacía la tontita
y también le preguntaba
quién era esa Campanilla
que tanto en su blog entraba...

pues me estaba dando celos
tanto p'aquí y para allá
y el respondía muy serio:
¡de verdad que no sé ná!

Descubierto ya el secreto
la gracia se terminó
y aunque para mi es un reto
prefiero contarlo yo

Como ya saben ustedes
estuve por S. Andrés
y claro, entre tantas mieles
se me escapó y lo conté

Lizundia, una precisión,
llámeme ud. por mi nombre
porque los que me conocen
no van a saber quién soy...

Juana pone en mis papeles,
Juana Mari me pusieron
así que si no es molestia
con este nombre prefiero.

Me alegró al leer su blog
lo que de mi Ud. ponía
y sí que hubo sintonía
así me lo pareció

unas cañas divertidas
las que en el hotel tomamos
pues hicimos unas risas
mientras hablaba su hermano

A mis amigos del blog
y al oyente Marcelino
mando un cariñoso abrazo
de vuelta ya a mi destino

Y al amigo Anghel Morales
decirle que ya lo ve,
no era la tal Campanilla
aquella que pensaba Ud.

Ahora que sabe quien soy
espero no le moleste
si sigo entrando en su blog
y alguna copla le cuelgue...

Adiós a todos, amigos
supongo que defraudados,
pues no contaban conmigo
y con mis polvos dorados...